24 de marzo: Guadalest y Altea (Alicante)

Estamos de concentración-vacaciones de Semana Santa, durmiendo en la locura de pueblo que es Benidorm (porque uno de nuestros amigos es de aquí) y entrenando en la pista de atletismo de Alfas del Pi.

Después de entrenar y comer, hemos ido a visitar un pueblo en el interior de la provincia, llamado Guadalest. A pesar del fortísimo viento y el frío que hacía, hemos disfrutado de unas vistas espectaculares del pantano de Guadalest y paseado por su casco antiguo. No ha sido muy agradable el paseo pero por suerte no había que caminar mucho para dar con esta impresionante panorámica:En lo alto del pueblo de encuentra el Castillo de Guadalest, al que no hemos podido entrar porque estaba cerrado (eran las 6 de la tarde, quizás estuviese cerrado por el viento).

Aunque no hemos entrado, en este pueblo se encuentra un museo de esculturas en miniatura: es muy curioso porque son figuras esculpidas es objetos sumamente pequeños y la verdad que es bastante impresionante (tenían algunos expuestos en la entrada): muñecos tallados en puntas de lápiz, en cabezas de alfileres, en pelos…

Después hemos vuelto a la costa a ver si subía un poquito la temperatura, y así era. Nos hemos acercado a dar un paseo por el casco antiguo de Altea, donde ya era noche cerrada y las calles de casas blancas y suelos adoquinados estaban iluminadas. No había estado antes en este pueblo pero según parece, en verano está abarrotado de gente, y por el contrario, hoy se podía disfrutar de un agradable paseo sin aglomeraciones, eso sí, con unos cuantos (bastantes) grados de menos.

Hemos subido a lo alto del pueblo desde donde se podía ver toda la línea de costa iluminada con Benidorm a lo lejos:

Y para terminar y entrar en calor, hemos tomado unos chocolates en la chocolatería Valor, junto al mar. Tienen un montón de cosas para elegir (casi todas con chocolate) y también se pueden comprar tabletas y más dulces para llevar.

Más rincones especiales en Asturias

Dado que he visitado Asturias (sobre todo la parte oriental) varias veces, os voy a dejar una lista de lugares que podéis visitar, junto con los de los posts anteriores (12 de octubre: Puertas de Vidiago (Asturias)13 de octubre: Llanes, Poó y Celorio14 de octubre: San Vicente de la Barquera y Herrerías (Cantabria) y 15 de octubre: Peña Tú (Asturias), Cóbreces, Toñanes y Santillana del Mar (Cantabria)). Estos que os dejo (si hacéis click podéis ver su localización en el mapa) creo que merecen realmente la pena, aunque todo el norte es precioso:

  • Playa de Gulpiyuri: Una de las más curiosas de Asturias. Es una playa en el interior de los acantilados, muy pequeña y sólo tiene agua cuando la marea está alta, así que aseguraos de que la hora a la que vais es la correcta! Lo que no me gusta es que cada vez es más turística y siempre está llenísima de gente. El coche se aparca al principio del camino, poco después de dejar la autovía.

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  • Cobijeru: Para mi gusto, muchísimo mejor que Gulpiyuri y mucho menos conocida. Es también una playa interior, pero además tiene un puente de piedra creado de forma natural, y a su lado hay una abertura en el suelo que es la entrada a una cueva subterránea que acaba en el mar. El acceso es libre y en mi opinión me parece espectacular. Eso sí, necesitaréis linternas. Para llegar a esta playa hay que andar unos 10 minutos desde el pueblo mas cercano, Buelna, donde podréis dejar el coche sin problema.

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  • Cueva del Pindal: no es la típica cueva de estalactitas y estalagmitas, sino que es especial porque contiene pinturas rupestres. Es importante que llaméis para reservar (608 17 52 84) porque no está abierta siempre, tiene unos horarios concretos.
  • Cangas de Onís y su puente romano para sortear el Sella.
  • Covadonga, la imponente Santina y los Lagos (a los que no se puede subir en coche, sino pagando una excursión en autobús por 8€ más los 3€ de dejar el coche aparcado abajo).
  • Playa de la Franca, muy alargada y muy cambiante debido a las mareas.
  • Lastres, un pueblo con mucho encanto (y muchas cuestas). El restaurante El Mirador se encuentra en lo más alto del pueblo y a parte de tener una vistas geniales, se come muy bien.
  • Nacimiento del Río Purón: un paseo llano y fácil hasta el nacimiento del río.
  • Nacimiento del Río Cabra: mucho mejor excursión que al nacimiento del Purón, en mi opinión. Ruta preciosa, fácil y el nacimiento tiene mucho encanto.
  • Antena de Alevia: Desde Alevia, donde podéis aparcar el coche, comienza una ruta bastante empinada hasta la antena, en lo alto de la montaña. Hay dos caminos: el empinado y «corto» (aproximadamente 1 hora, depende de lo rápido que vayáis), o el menos empinado y largo. En cualquier caso, es recomendable subir en un día despejado porque las vistas desde la antena son de lo mejor que vais a encontrar en Asturias. Vistas 360º hacia el mar por un lado y Picos de Europa por otro. Simplemente espectacular.

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Como última recomendación, si sois de los que preferís camping, en esta zona de Asturias está mi camping favorito: el Camping La Paz. Se encuentra en dos colinas completamente verdes y justo al lado del mar, las vistas son increíbles y la zona de sólo tiendas de campaña es muy tranquila y bonita. Es como plantar la tienda en medio de la explanada de la pradera de Windows!

14 de octubre: San Vicente de la Barquera y Herrerías (Cantabria)

Después del entrenamiento mañanero (en el mismo sitio que ayer), fuimos a comer a San Vicente de la Barquera, a menos de media hora en coche de donde nos alojamos. Fuimos a lo seguro, a nuestro restaurante favorito del pueblo, llamando El Barquereño, a comer nuestro plato por excelencia, un buen arroz con bogavante. El sitio lo descubrimos por casualidad: es el primer restaurante después de cruzar el puente hacia el lado del castillo. En su día, hace dos años, no nos dio muy buena espina porque era el típico restaurante con un camarero en la puerta atrayendo público y que además tenía fotos de los platos en las paredes de fuera, lo típico de un restaurante malillo, pensamos. Pero nada más lejos de la realidad. La comida está buenísima y además los precios son muy asequibles: 35€ por un arroz con bogavante para dos, con bebida y postre incluido.

Después de comer y de tomar un helado en Regma (la heladería – artesana – de Cantabria y Asturias por excelencia, tiene varias tiendas por ambas comunidades), fuimos a pasear en dirección al rompeolas, donde nunca Antea habíamos estado. Las vistas desde allí son preciosas, se ve el pueblo y la zona de la playa por un lado, y el mar abierto por otro, y además mirar las olas chocando contra las rocas es hipnotizante.

Vistas del faro desde las rocas más altas del rompeolas (subimos escalando, no hay camino para subir)

En la segunda mitad del rompeolas hay una señal de prohibido el paso salvo a personas autorizadas, pero nadie hace caso y todo el mundo pasa. Suponemos que es porque cuando hay mal tiempo estar aquí es bastante peligroso y así el ayuntamiento se quita de responsabilidades. Así que, si venís en invierno, con lluvia o mucho viento, debéis tener mucho cuidado y quizás sea mejor no pasar.

Vista del mar abierto

Después nos fuimos con el coche montaña adentro hacia la zona de Herrerías, que está dividida en varios barrios o pueblos pequeños. Concretamente nos acercamos a Bielva, y aparcamos el coche en una explanada a unos 5km del pueblo (Km 13 de la carretera CA850), desde donde empezaba una ruta de sólo 700m pero 100 de desnivel (la ruta está marcada con pintura azul y blanca cada ciertos metros), hasta un lugar llamado Mirador de Lleno. Es una de las cimas más altas de Herrerías y desde ahí se ve desde el mar por un lado hasta los Picos de Europa por el otro. Las vistas son impresionantes, y además hoy era un día de calina que hacía que el paisaje luciese muy diferente a normalmente. Llegamos arriba justo cuando estaba poniéndose el sol, y he de decir que merece la pena subir para contemplar la puesta de sol desde allí.

Puesta de sol desde Los Pigüezos

Las formaciones rocosas tan peculiares que hay al llegar arriba se llaman Los Pigüezos.

Ya de vuelta en el nivel del mar, fuimos a dar una vuelta por Colombres (ya en Asturias), pues nos habían hablado muy bien de este pueblo. Justo estaban celebrando un encuentro internacional de motos antiguas y estaba el lugar patas arriba. Además, llegamos a las 20:30 y no pudimos entrar al Museo de Emigración, que es lo más interesante de allí. Así que decidimos volver y dar por finalizado el día.

Casa del Museo de Emigración (desde fuera del recinto)