Último día de vacaciones! Y día libre de entrenamientos, así que teníamos mañana y tarde para visitar bonitos lugares.
Por la mañana nos acercamos hasta el Cabo de la Nao. Es accesible con el coche, de hecho hay un restaurante junto al faro. Las vistas desde allí son preciosas y muy amplias, ya que es el cabo que más sobresale de toda esa costa, pero no se puede llegar al extremo del cabo porque está dentro del recinto del faro.
Después visitamos la cercana Cala Ambolo, mi favorita de la zona (había estado un par de veces antes), pero en verano se llena de gente. Supuestamente es nudista, pero nadie respeta eso y la mayoría andan con bañador.
Si vais en época de baño, recordad llevar chanclas cerradas o deportivas, ya que hay que bajar bastante y caminar por rocas.
Después de comer, nos fuimos de nuevo al Montgó, pero a la cara opuesta al otro día. Quisimos subir a la cima, pero el recorrido era de 6km (sólo ida) así que subimos unos 2,5km y dimos media vuelta. Igualmente merece totalmente la pena porque sólo subiendo 2km desde el camino que comienza en Jesús Pobre, llegas a la cresta de la montaña y se puede ver el paisaje en casi 360° y mar por ambos lados, bastante espectacular.
Para terminar el día, y las vacaciones, compramos unas palmeras de chocolate en la Pastelería Agulló de Denia (la más antigua del pueblo, y dicen que la mejor) y fuimos a ver la puesta de sol desde el Faro Rojo (al final del Puerto Deportivo).