3 de agosto: Phuket – Islas Phi Phi

(Ver también Todo lo que necesitas saber si vas a viajar a Tailandia)

Dejamos Phuket esta mañana, no sin antes pasar por el Big Buddha, el monumento más famoso de la zona.

El Big Buddha es, como bien indica su nombre, una estatua gigantesca de Buda: 45 metros de alto y 25 de diámetro. Aún es más impresionante porque está en lo alto de una montaña y desde allí hay una panorámica de 360° de todo Phuket.

Fue construido (y de hecho aún están en ello) después del tsunami del año 2004, que afectó a la provincia duramente.

La entrada es gratuita pero se pueden hacer donaciones de varias formas, como haciendo ofrendas a los monjes (que a ratos están cantando mantras), comprar algún souvenir, o hacer ofrendas a estatuillas de Budas (que están por todas partes) a cambio de tener salud.

A pesar de que está preparado 100% para turistas, en el templo que hay junto al buda y sus alrededores, se respira mucha paz y tranquilidad, y además no está para nada masificado (también es verdad que ahora es la temporada baja de turismo en Tailandia).

Para subir hasta aquí, hay una carretera de unos 6km por la montaña, empinadísima, por lo que hemos optado por coger un taxi desde nuestro hotel (precio cerrado de 600BTH y además el taxista nos esperaba arriba para volver cuando quisiésemos).

En Phuket parece ser que no hay otra forma de moverse que no sean taxis o andando, no hemos conseguido dar con ningún autobús, y no nos hemos atrevido a conducir las típicas motillos que alquilan porque conducir por aquí es una locura, además de que se circula por el lado contrario.

De vuelta en el hotel, nos ha venido a buscar una furgoneta para llevarnos al puerto de Phuket (Rassada) para cruzar el mar en barco hasta el siguiente destino: las Islas Phi Phi. El trayecto han sido 350BHT por persona, y duraba alrededor de 1h y media. Es un barco bastante grande, con asientos cómodos y capacidad para varias decenas de personas.

Ya en Phi Phi, después de buscar y dejar las cosas en el hotel, hemos paseado por las calles, que están llenas de restaurantes, tiendas, puestos… todo de cara a los turistas (aquí no hay nada más que turistas y gente que trabaja para el turismo) por lo que no se ve demasiado auténtico, de todas formas, el paisaje es precioso y la playa en la que hemos estado esta tarde, también (Loh Dalum Bay).

Como a las 19:00 ya prácticamente no hay sol, no hemos podido ver nada más, salvo dar una vuelta por el pueblo después de cenar… mañana nos adentraremos en las profundidades de la isla a ver qué pinta tiene.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s