La ciudad de Zaragoza está situada en un lugar estratégico por encontrarse más o menos a medio camino entre Madrid y Barcelona, y ser una de las ciduades más antiguas e importantes de España hace que rezume historia por cada esquina.
En nuestro último viaje de competición tuvimos la oportunidad de pasar un día paseando por sus calles, y aquí os traigo una lista de los 5 lugares que no os podéis perder y que os dará tiempo de sobra a visitar si estáis de paso por aquí.
1. Basílica del Pilar
Como no, tenía que ser la primera. Además de ser la principal atracción turística de Zaragoza y el icono de ciudad, es el primer santuario mariano del mundo y un importante destino de peregrinación de todas partes del mundo. Con unos 5 millones de visitantes anuales, es uno de los monumentos más visitados de España.
En agosto de 1936 durante la guerra civil española un avión republicano bombardeó la Basilica, fueron 4 bombas, una cayó al Ebro, otra a la Plaza del Pilar y dos en el interior del templo sin que ninguna de ellas llegase a estallar, y de hecho, aún están dentro de él, colgadas en una pared junto a la entrada.
Por solo 3€ (precio de subir y bajar en ascensor) se puede disfrutar de las mejores vistas de Zaragoza desde el mirador de una de sus cuatro torres.
Añado aquí la Plaza del Pilar, conocido lugar de dimensiones enormes en el que se encuentra la Basílica. También en ella, el Ayuntamiento y la Lonja.
2. La SEO (Catedral de El Salvador)
La Catedral de El Salvador, comúnmente conocida como La Seo, fue construida sobre una mezquita de la antigua ciudad musulmana. Se componede varios estilos artísticos, desde Románico hasta Neoclásico.
En la parte exterior de La Seo, es interesante el muro de la Capilla de San Miguel Arcángel, obra mudéjar.
Gracias a ella, Zaragoza pasó a ser la primera ciudad de España con dos catedrales, junto con El Pilar.
3. El Puente de Piedra
Es el puente más antiguo que cruza el río Ebro. Data del siglo XV, pero hay algunas referencias que indican que en época romana hubo un puente que fue destruido en el año 827-828 y posteriormente construido por Abderramán II.
El que se conserva tiene unos 225m. La estructura actual fue construida en el siglo XV en estilo gótico, con piedras de Muel, La Muela y Castellar y bajo la dirección de los maestros españoles Frenoya y Coirat y del italiano Matéu.
El proyecto fue de gran envergadura que requirió incluso la ayuda del papa aragonés Benedicto XIII, más conocido como el papa Luna, para la concesión de permisos de extracción de material y construcción.
4. Mercado Central
Construido en 1903, aún hoy sigue teniendo la misma función, y de hecho ha sido remodelado hace menos de un mes, por lo que aún más merece la pena su visita.
Antes de su construcción, había una plaza que también era el mercado de la ciudad, cuya función se venía dando desde el año 1210.
5. Palacio de la Aljafería
La Aljafería es un monumento de origen hispano-musulmán del siglo XI. A lo largo de los años, ha sufrido distintas reformas, donde destaca la más importante realizada por los Reyes Católicos en 1492.
A lo largo del tiempo ha tenido diversas funciones: alcázar islámico, palacio medieval mudéjar, fue también palacio de los Reyes Católicos, cárcel de la Inquisición, cuartel militar y sede de las Cortes de Aragón. Un poco de todo, vaya.
Y si buscáis algún sitio donde comer o cenar, sin duda tenéis que pasar por El Tubo, la zona de bares y tapas por excelencia de la ciudad, junto a la Plaza de España.