Situada en el municipio de Saelices (Cuenca) a unos 100km de Madrid, Segóbriga es un Parque Arqueológico perfecto para una escapada de día desde Madrid o desde Cuenca.
Segóbriga se trata de un impresionante legado romano, y es que hay algo que la hace especial: a diferencia de otras ciudades romanas, como por ejemplo Mérida, cuya ciudad moderna se encuentra edificada sobre la antigua, Segóbriga fue abandonada en el siglo V porque el río que pasaba por ella se secó (fue entonces cuando surgió la localidad de Saelices, a 3km y ubicada junto a un manantial). Este suceso hizo que no volviese a ser habitada, y unido al hecho de que se encuentra en un cerro, que fue enterrando sus estructuras por efecto natural, ha provocado que la ciudad se conserve en muy buenas condiciones.

De hecho, a día de hoy sólo hay excavado un 20% de la ciudad. El 80% restante sigue enterrado bajo las tierras del cerro.
Por desgracia, las más impresionantes edificaciones como el circo, el teatro o el anfiteatro fueron fácilmente encontradas durante la Edad Media, y recordemos que antiguamente el concepto de Patrimonio Histórico era prácticamente inexistente, por lo que los bloques de piedra de estos lugares fueron sustraídos para construir otros complejos en localidades vecinas, como por ejemplo, el cercano Monasterio de Uclés, del que se puede afirmar que un gran porcentaje está construido con piedras de Segóbriga.

El apogeo de Segóbriga fue en los siglos I y II, principalmente gracias a sus minas de Lapis Especularis, que no es otra cosa sino un tipo de yeso transparente, que se usaba como cristales para las ventanas antes de que los romanos descubrieran el vidrio. Es más, la decadencia de Segóbriga fue causada básicamente por el vidrio, ya que a partir de ello, la economía de la ciudad cayo en picado.

El nombre de Segóbriga significa «ciudad de la victoria» y no es un nombre romano, sino celtíbero. Y es que aquí, previo a los romanos, había una ciudad celtíbera, de la cual no queda nada material. Los romanos, en sus invasiones de territorios, solían dar una oportunidad a los conquistados para rendirse ante ellos a cambio de dejarles seguir viviendo sus costumbres como hasta entonces, y pagar tributo a roma. Pero este no fue el caso de Segóbriga, que se rebeló contra los romanos… y perdió. El resultado es que Roma destruyó toda la ciudad y la tomó a la fuerza. Sólo dejó el nombre original, y únicamente porque el significado tenía sentido para ellos, ya que habían conseguido la victoria sobre los celtíberos.
Cómo visitar Segóbriga
Podéis consultar los horarios de apertura, que cambian según la época del año, aquí. En la misma página podéis comprar las entradas por 6€, aunque también se pueden comprar en taquilla al llegar.
Es interesante que intentéis cuadrar la visita con los horarios de las visitas guiadas, que están incluidas en el precio. Son a las 11:00, 12:30 y 16:00 (17:00 entre abril y septiembre) y duran 1h30. Nosotros pudimos disfrutar de ella y nos gustó bastante, lo que os he contado en este post lo aprendí gracias a la guía, que nos contó muchas otras cosas.

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