Pues contra todo pronóstico, ¡aquí estamos! Superadas las pruebas y papeleos, hemos cumplido la misión de llegar a Nueva York en una época en la que el COVID está dando bastante guerra. Os iré contando diariamente nuestro paso a paso de este viaje de 7 días.
Hoy ha sido día casi completo de viaje. A las 5:00 ya estábamos en el aeropuerto para coger el vuelo de TAP hacia Lisboa a las 6:50. Para subir al avión nos han pedido una PCR negativa y el certificado de vacunación. Al no facturar maleta, nos lo han pedido en la puerta de embarque, así que en caso de pasar antes por el mostrador, os lo pedirán allí.

Después de 1h15, ya en Lisboa, nos ha tocado hacer una escala de casi 5 horas, puesto que el vuelo a Nueva York salía a las 12:00. En este embarque, más papeles: de nuevo la PCR (máximo de 1 día) y el certificado de vacunación, y además un impreso de 5 páginas que había que daban allí mismo y que los azafatos revisaban minuciosamente junto a la documentación antes de dejarnos subir.
Después del infinito embarque, nos esperaban 8h30 de vuelo hasta nuestro destino final, en el que nos han dado otro papel para rellenar, esta vez a cargo del gobierno americano: se trata de la declaración de aduanas, y hay que entregarlo al llegar a EEUU en el control de pasaportes.
A las 15:30 (hora de NY, que son 6h menos que en España) hemos aterrizado en el aeropuerto de Newark (al este de New Jersey y el mejor comunicado con Manhattan a día de hoy) y aún nos quedaban unos 30 minutos de cola en el control de pasaportes, donde no hemos tenido que mostrar el visado ESTA puesto que ya está todo informatizado. ESTA es el visado de turismo que hay que hacer para poder viajar, cuesta 14$ y podéis adquirirlo en la página oficial del gobierno rellenando un formulario larguísimo pero sencillo. La aprobación del visado suele darse en unas pocas horas o máximo 2 días (así que es algo que hay que hacer con tiempo).

16:30 y por fin libres… para averiguar cómo llegar a Manhattan. Nos hemos decidido por el tren, ya que los NY es famoso por sus atascos y queríamos ahorrarnos algo de tiempo. Siguiendo las indicaciones de Air Train hemos llegado hasta este monorail que «sobrevuela» las terminales del aeropuerto y hace una última parada en la línea de tren que va de Newark a Nueva York. En la misma entrada es posible comprar, por 15$, los tickets hasta Penn Station, en pleno centro de la ciudad y muy cerca de nuestro hotel.
Después de 25 minutos de viaje y de recorrer a pie unas pocas manzanas, hemos llegado por fin al hotel, sobre las 18:00. Nos alojamos en el Holiday Inn Express Times Square South, súper bien situado a muy poca distancia del Empire State y de Times Square, entre otras.
¡Y fin del trayecto! Las energías no nos han dado para mucho, así que hemos ido a lo fácil: paseo hasta Times Square y cena en una hamburguesería.
Times Square
La plaza de Times Square es el corazón de Nueva York y con los años se ha transformado en un símbolo de esta ciudad cosmopolita, gracias a sus luces y sus llamativos carteles publicitarios. El centro neurálgico de la zona es la plaza, en el cruce de Broadway con la 7ª Avenida. Aquí se amontonan bares, restaurantes, teatros, museos y ambiente, mucho ambiente a todas horas.
Times Square tiene una historia relativamente reciente ya que, hasta finales de los 90, la zona era sinónimo de crimen y drogas, pero durante el mandato del alcalde Rudolph Giuliani durante esos años, Times Square fue reciclado para pasar a convertirse en una de las mejores zonas de Nueva York.

Aviso a navegantes (por si acaso): en la se agolpa tanta gente que a más de uno le podrá resultar agobiante pero realmente es que ese es el propio encanto del lugar, junto con los carteles luminosos en cada esquina.
🍔 Cena en The Counter
Hace mucho frío y no estábamos por la labor de comernos mucho la cabeza, así que hemos ido a parar a The Counter, de camino al hotel, una hamburgesería en la que puedes elegir todos los ingredientes de la hamburguesa (tipo de pan, de carne, toppings, quesos, salsas, patatas…) y nos ha gustado mucho, aunque en la foto parezca que no tiene muy buena pinta. Eso sí, muy cara para lo que es: dos hamburguesas con patatas y agua del grifo han sido 52$. Aquí las propinas están incluidas en la carta casi siempre, y suelen rondar el 15%. A ello hay que sumarle un 7% de tasas que nunca están incluidas en los precios de la carta, así que sí: comer de restaurante en NY es muy caro.

[…] respuesta es que sí, las recomendamos, pero he de decir que nos gustaron más las de The Counter el primer día. Eso sí, ha sido la comida/cena más barata que hemos hecho hasta el momento, y eso es un punto […]
Me gustaMe gusta
[…] pues compramos otro billete el otro día para volver a España directos, más rápido y cómodo que al venir, que se hizo un poco largo y tedioso entre tanto documento a presentar y la larga escala en […]
Me gustaMe gusta